ELENA MELANIA LENZKEN
(1901-1982)
Elena Melania Lenzken y Cipriano Fernández fueron los fundadores de la durante mas de seis décadas tradicional tienda “La Chaqueña” ubicada en calle San Martín y Avda. 25 de Mayo.
Ambos eran oriundos de la ciudad de Resistencia, donde trabajaban en dos tiendas de renombre en la capital chaqueña hacia 1927, fecha en que contraen matrimonio.
Algunos años mas tarde se produce la disolución de la firma en la
que trabajaba Cipriano Fernández y uno de sus ex patrones le ofrece asociarse para fundar una tienda en Quitilipi. Así nace la firma Cipriano Fernández y Cía., abriendo el 2 de febrero de 1932 la Tienda “La Chaqueña”, por entonces sobre Avda. 25 de Mayo entre San Martín y Río Negro.
Acorde a la experiencia con que contaban, ambos se desempeñan en la tienda como socios-dueños y vendedores. El negocio funcionaba bien pero debieron esforzarse mucho. Por las noches, luego de cerrada la tienda dedicaban su tiempo a cortar y coser mosquiteros en distintos modelos para cama y catre; y con moldes estándar y telas económicas confeccionaban camisas y calzoncillos.
Dado el crecimiento del negocio, en poco tiempo debieron trasladarse al local de la esquina de 25 de Mayo y Buenos Aires (hoy San Martín) y en 1936 la sociedad abre una sucursal en Pcia. De La Plaza, turnándose los esposos en forma semanal para atender una y otra tienda. Cabe señalar que La Chaqueña fue la primer tienda local que contó con su logotipo propio, distintivo que acompañaba la tienda desde su fundación por parte de sus antiguos dueños.
En aquella época el movimiento de la sucursal de Quitilipi tenía un
movimiento muy importante, alcanzando a tener una cartera de 700 cuentas corrientes, a la que se debía sumar los clientes de contado que se multiplicaban en la temporada de cosecha. La ropa y cortes de tela que se vendían eran de calidad, ya que el socio capitalista de la firma, Nicolás Villa, era propietario en Buenos Aires de la firma Ruybal, una de las mas sobresalientes en la importación y venta de casimires en la capital del país.
En julio de 1945 fallece en señor Cipriano Fernández, dejando a su esposa Elena sola con tres hijos menores, una de 14 años, uno de 9 y el menor de 9 meses.
Caballerosamente el socio de a firma, don Nicolás Villa, ofrece a la viuda con cual sucursal quedarse, otorgándole además todas las facilidades para el pago de la parte correspondiente. La señora Elena elige la sucursal de Quitilipi.
Fueron para esta mujer años muy duros y de mucho trabajo. La firma cambió de nombre y pasó a llamarse “Tienda La Chaqueña de Viuda de Cipriano Fernández e Hijos. S.C.C.”. El intenso y sacrificado trabajo de doña Elena hizo que se pudiera pagar la totalidad de la tienda y que en el año 1956 pudiera adquirir en propiedad el local que ocupaba el comercio.
En 1965 doña Elena concreta un antiguo sueño: demoler el viejo edificio y construir nuevas instalaciones para la tienda a fin de dar mayor confort de su clientela y los siete empleados con que contaba.
En marzo de 1982 fallece esta sacrificada mujer, que no solo fue una gran vendedora que con su dominio del idioma guaraní atraía a los cosecheros y gente de la zona rural, sino una excepcional comerciante, fiel a su palabra y exacta en el cumplimiento de sus compromisos. Si bien dedicó su vida al comercio y su familia, las cosas de la comunidad nunca le fueron ajenas. Fue una permanente colaboradora de la Parroquia San Antonio, la Comisión Propulsora del Colegio Popular Secundario contó siempre con su apoyo, incluso económico; colaboró con la Comisión del Instituto Nuestra Señora de Fátima y la Comisión Fundadora del Club Social, el Consorcio Caminero y la Cámara de Comercio también conocieron su generosidad.
Fallecida doña Elena Lenzken continúa con la firma comercial su hijo Claudio Hugo Fernández hasta 1993, cuando los cambios en la actividad comercial, en el tipo de mercadería a vender y la reducción en la capacidad de compra de la clientela hicieron que definitivamente se cerraran las puertas de esta tradicional tienda después de sesenta y un años de actividad comercial.
En el mes de noviembre de 2007, dentro del marco de las festividades del 96° Aniversario de la fundación de Quitilipi, autoridades del municipio y familiares colocaron sendas placa recordatoria frente al local donde por tantos años funcionara esta recodada tienda.
El Observador
Fuente: Texto: Justina Rios de Cardozo
Fotografías: Archivo propio